La semana publiqué un breve análisis sobre lo sucedido en el caso Volkswagen y expuse mis razones por las que decidí no vender en ese momento mis acciones. En primer lugar, quiero agradecer a todos vuestros comentarios en la publicación. Ha habido opiniones de todo tipo, lo que demuestra la complejidad del caso y que en el mundo de la inversión en bolsa no todo es blanco o negro, sino que muchas veces existen diferentes tonos de gris. Tras mucho meditar, he tomado la decisión de vender mis acciones de Volkswagen. En este artículo os explicaré mi decisión, junto con las razones que hay para comprar, mantener y vender acciones de Volkswagen.
Tabla de contenido
Razones para comprar o mantener las acciones de Volkswagen
No ha sido fácil tomar la decisión de vender mis acciones de la compañía. De hecho, hay argumentos más que razonables para mantener e incluso comprar acciones de Volkswagen en estos momentos. A continuación explicaré los 3 de ellos, aunque os animo a aportar algunos más en vuestros comentarios.
Sin duda, la principal razón por la que me ha costado tanto vender las acciones de Volkswagen es su valoración. Volkswagen cotiza en estos momentos a:
Es casi imposible encontrar ratios tan atractivos en la bolsa en estos momentos. No obstante, siempre digo que los análisis deben ser tanto cuantitativos como cualitativos. Como dice siempre Aswath Damodaran
“La valoración de empresas tiene dos partes: los números y la historia”
Los números me encantas. El problema es que la historia no me gusta tanto, como podréis imaginar.
Otro argumento para no vender es que la sanción posiblemente sea bastante menor a la anunciada por los medios. Eso puede ser cierto, pero a medias. De momento, sólo se habla de la sanción por parte de la administración estadounidense, que supongo que será bastante menor a la anunciada. Sin embargo, pueden llegar sanciones de otros países. Y no sólo monetarias. Sin ir más lejos, Suiza acaba de prohibir temporalmente la venta de los vehículos Volkswagen que puedan tener el dispositivo para trucar las pruebas de emisión de gases. Esto supone la paralización de más de 180.000 automóviles que estaban listos para venderse. ¿Puede haber más casos como éste? Es posible, pero lo cierto es que no tengo ni idea y era algo que me preocupaba bastante.
Por último, yo también argumentaba que Volswagen está bien posicionada para el futuro crecimiento de la demanda de automóviles en países en vías de desarrollo. Sin embargo, esta crisis puede mermar las ventajas competitivas de la compañía a largo plazo como os expondré a continuación.
Razones por las que he vendido mis acciones de Volkswagen
Una de las principales razones que me han hecho vender es la incertidumbre en la valoración de la compañía. Por todas las razones que expondré a continuación, se me hace imposible realizar una valoración precisa de la compañía. No sé si la empresa saldrá de la crisis o acabará desapareciendo. Estoy casi seguro de que resistirá o será rescatada, pero no sé el tiempo que tardará en recuperar su imagen y rentabilidad actual ni es que llega a recuperarla.
Sin embargo, la principal razón que me ha hecho vender las acciones de Volkswagen es la falta de confianza en la compañía y su equipo gestor. No puedo saber si ésta ha sido su única artimaña o si han cometido más ilegalidades en el pasado que puedan salir a la luz próximamente. Parafraseando al también alemán Friedrich Nietzsche en su obra “La genealogía de la moral”:
“Lo que más me molesta no es que me hayas mentido, sino que, de aquí en adelante, no podré confiar en ti”
Hay que destacar que la causa de esta crisis en la compañía no ha sido negligencia, sino que ha sido un fraude intencionado. La compañía ha engañado de forma premeditada a gobiernos y consumidores para ganar más dinero. Obviamente, aunque nos quieran hacer pensar lo contrario, tenía que haber muchos implicados en la empresa en todos los niveles. Para más inri, tenían la hipocresía y la desfachatez de resaltar el carácter ecológico de sus coches en sus anuncios.
Tampoco podemos olvidar que la industria del automóvil es uno de los más competitivos que existen. Pocas compañías obtienen rentabilidades superiores a su coste de capital en este sector. Este escándalo puede mermar la capacidad de Volkswagen para competir cara a cara con otras empresas que ya se encuentran en el mercado y con con potenciales nuevos competidores como puede ser Apple con su posible entrada en este sector.
Además, a largo plazo, tanto las posibles sanciones económicas a las que se enfrenta Volkswagen como la más que posible disminución en los márgenes y las ventas harán que la compañía tenga menos dinero para seguir invirtiendo en I+D y creando vehículos atractivos por los que los consumidores estén dispuestos a pagar precios Premium. Esto puede hacer que Volswagen entre en un círculo vicioso del que sea muy difícil salir.
Personalmente, mi percepción como cliente fiel de la marca es muy negativa. Como ya os he contado, mi anterior coche fue un Volkswagen Polo y mi coche actual es un Volkswagen Golf. Mi experiencia con ambos había sido realmente positiva y mi intención era seguir siendo cliente de Volkswagen de forma indefinida. Esto ha cambiado y en estos momentos creo que no volvería a comprar coches de esta marca.
Por último, me gusta ser accionista de compañías que me dejen dormir tranquilo. No quiero estar preocupado pensando en los nuevos problemas que tenga que afrontar la compañía o si tendrá algún otro escándalo oculto. No me compensa la rentabilidad potencial en relación al riesgo y los quebraderos de cabeza que está ocasionando.
Finalmente, he decido vender mis acciones de Volkswagen y asumir una pérdida superior al 40% del precio de compra, que ha tenido un impacto negativo aproximado de un 3% en mi cartera de inversión. No ha sido fácil, pero creo que es la decisión correcta.
Reflexión final sobre el caso Volkswagen y la inversión en bolsa
A nadie le gusta perder dinero. A mí me repatea. Sin embargo, así es la bolsa. En algunas operaciones se gana y en otras se pierde. Nuestro objetivo como inversores es que las operaciones en las que se gana compensen con creces las inversiones en las que se pierde. Personalmente, estoy seguro de que no será la última operación que me salga mal. Eso sí, también estoy seguro de que las operaciones exitosas seguirán compensando con creces los fracasos como éste.
Por último, quiero aclarar que vender mis acciones ha sido mi decisión personal. Mi objetivo con este análisis es enseñar el razonamiento detrás de la venta de mis acciones. En ningún caso supone una recomendación de venta. Cada persona deberá realizar su análisis para decidir qué hacer con su dinero o sus acciones bajo su cuenta y riesgo.
Una vez más, ¡ahora es vuestro turno!
¿Qué hay que hacer con las acciones de Volkswagen?
¿He tomado una mala decisión al vender mis acciones de Volkswagen?
¿Debería haber mantenido o comprado más?
¿He hecho lo correcto?
¡Espero vuestros comentarios!