Uno de los factores más importantes a la hora de tomar una decisión de inversión es su riesgo. Aunque muchos ahorradores lo pasan por alto, no es un tema que debamos tomarnos a la ligera. Muchos inversores han acabado perdiendo gran cantidad de dinero por culpa de no dedicar el tiempo necesario a analizar el riesgo asumido en sus operaciones. En este artículo veremos cómo medir el riesgo de una inversión en bolsa basándonos en 4 factores clave.
Tabla de contenido
La importancia de medir el riesgo de una inversión en bolsa
En lo referente al riesgo, suelo encontrarme con ahorradores con dos posturas extremas:
- Los que buscan inversiones 100% seguras
- Los que buscan maximizar su rentabilidad sin importar el riesgo
En el primer caso, es necesario tener en cuenta que ninguna inversión es 100% segura. Incluso escondiendo tu dinero en casa existe la posibilidad que se carbonice en un incendio o que se lo coman las polillas. Por lo tanto, debemos buscar una forma de riesgo moderada. En un artículo próximo veremos cómo minimizar este riesgo.
Por otro lado, están los que quieren maximizar su rentabilidad a corto plazo a toda costa sin tener el riesgo asumido en sus inversiones. Si es éste tu caso, te recomiendo que seas paciente y busques ganar dinero a largo plazo con un riesgo controlado. De lo contrario, lo más probable es que acabes perdiendo tu dinero en poco tiempo, como le suele suceder a este tipo de inversores cortoplacistas y poco prudentes.
Como sucede en muchas ocasiones, la virtud se encuentra en un punto intermedio. Debemos buscar inversiones que maximicen nuestra rentabilidad con un riesgo existente, pero controlado y asumible.
Cómo NO medir el riesgo de una inversión en bolsa
Hay dos formas bastante populares de medir el riesgo de una inversión en bolsa. Éstas son:
- La volatilidad
- La tendencia
A pesar de su popularidad, estas formas de medir el riesgo de una inversión no tienen sentido para mí ni para los seguidores de value investing. Déjame que te explique las razones.
La volatilidad
La volatilidad mide la oscilación en el precio de un activo financiero. La teoría moderna de carteras utiliza la volatilidad como medida del riesgo de una inversión.
¿Tiene esto algún tipo de sentido lógico? No, ninguno. Esta equiparación entre el riesgo de una inversión y la volatilidad se debe a la obsesión de la Escuela de Economía de Chicago sobre cómo matematizar toda interacción económica y financiera. Es algo que queda bonito y elegante en una fórmula, pero no tiene sentido desde un punto de vista de la lógica y la realidad financiera.
La realidad es que la economía y las finanzas, a pesar de su componente numérico, se basan en última instancia en la acción humana, que va más allá de los números. Por lo tanto, esta forma de medir el riesgo de una inversión no tiene sentido ni utilidad práctica.
La tendencia
La tendencia mide hacia donde se ha estado dirigiendo el precio de una acción en el pasado próximo. Cuando el precio es ascendiente, hablamos de “tendencia alcista”. Por otro lado, cuando es descendiente, hablamos de “tendencia bajista”. Según los especuladores que abrazan esta noción de riesgo, las empresas con tendencia bajista serían mucho más arriesgadas que aquellas con tendencia alcista ya que, según ellos, la tendencia suele mantenerse (aunque lo cierto es que ha sido demostrado académicamente que este tipo de inversión tendencial no es rentable bajo ninguna métrica).
Como sucede con la volatilidad, esta forma de medir el riesgo de una inversión se basa en el precio pasado y su movimiento. Una vez más, esto no tiene sentido desde un punto de vista lógico. De hecho, para un inversor de verdad, si el precio de una acción baja, el riesgo será menor, ya que compramos lo mismo a un precio más barato.
Cómo medir el riesgo de una inversión en bolsa
Como ya vimos en su día, el riesgo en una inversión, es decir, el riesgo en el value investing, se mide en base a la posibilidad de pérdida permanente del capital invertido.
Tienes que saber que no hay una forma fácil y simple de medir el riesgo de una inversión. No se puede medir el riesgo de forma precisa y milimétrica. No obstante, hay casos en los que se puede ver de una forma mucho más clara que en otros. En palabras de Benjamin Graham:
“No es necesario saber el peso exacto de un hombre para saber si está gordo”
No obstante, para hacer una breve orientación sobre la forma de medir el riesgo de una inversión, hay 4 factores clave que debemos analizar. Esto son:
- Nosotros
- Endeudamiento
- La capacidad competitiva
- Precio pagado
Nosotros
El mayor riesgo a la hora de invertir en bolsa somos nosotros. El principal problema que tienen los inversores en España es invierten sin la capacidad necesaria para hacerlo. Ello supone un gran riesgo en sus inversiones por 2 razones.
Por un lado, por falta de temperamento. Para ganar en bolsa es necesario ir contra la manada. Como diría Buffett:
“Ser miedoso cuando los demás son avariciosos y ser avaricioso cuando los demás son miedosos”.
Esto, que se dice pronto, no es tan fácil como parece.
Por otro, está el problema de falta de formación. Si quieres invertir en bolsa vas a necesitar invertir primero tiempo y dinero en formación. Ya te adelanto que no es algo fácil que se aprenda en un par de horas. Eso sí, también te aseguro que vale la pena. Si quieres una formación de primera, te animo a echarle un vistazo a mi Club de Inversores donde aprenderás a invertir en bolsa, paso a paso y desde cero (aprovecha la oportunidad, ya que tienes un gran descuento y mi garantía total de satisfacción).
También es importante invertir empresas que seamos capaces de entender. Para ello, es necesario asumir nuestras competencias y nuestras debilidades. Por ejemplos, yo suelo evitar sectores como la banca, los seguros o la biotecnología, ya que son sectores demasiado complejos de valorar para gente que no los conozca en profundidad.
El endeudamiento
Ya dentro del análisis de la empresa en sí, lo primero que debemos que mirar para analizar para determinar el riesgo de una empresa es su salud financiera. La base del análisis de la salud financiera es el estudio de los ratios de liquidez y solvencia y de los ratios de endeudamiento.
Un gran negocio puede acabar mordiendo el polvo por culpa de un endeudamiento excesivo. Esto se suele ver en negocios cíclicos o poco estables que no se han sabido preparar para los momentos de crisis durante los momentos de abundancia. Es precisamente lo que estamos viviendo a día de hoy en compañías de algunos sectores como el energético o el minero.
La capacidad competitiva
El segundo factor clave que debemos analizar es la capacidad de la empresa para competir de forma rentable en el mercado. Para ello debemos realizar un análisis competitivo completo.
Para determinar la capacidad competitiva de una empresa podemos empezar con un análisis del sector. Suele ser más interesante invertir en empresas que compitan en sectores estables, incluso aburridos, que en aquellas que coticen en sectores cuyo futuro sea difícil de predecir.
También es importante buscar empresas con ventajas competitivas sostenibles, sea cual sea su sector. Su presencia hará que puedan mantener su rentabilidad y su competitividad a largo plazo.
Este es un resumen muy breve de lo que debemos analizar. Personalmente, analizo unos 150 puntos antes de invertir en una empresa.
¿Es excesivo? Puede ser.
No obstante, prefiero pasarme de precavido que acabar perdiendo dinero. ;)
El precio pagado
Por último, tienes que tener claro que, por muy bueno que sea un negocio, sólo será una inversión interesante si lo compramos a buen precio.
Por lo tanto, contar con margen de seguridad adecuado será esencial a la hora de seleccionar nuestras inversiones. También será imprescindible una formación adecuada que nos permita analizar inversiones para calcular su valor intrínseco con la mayor precisión posible.
Resumiendo, ¿cómo sabemos si una inversión es arriesgada?
El endeudamiento, la capacidad competitiva y el precio pagado son factores clave a analizar para determinar el riesgo de una inversión. Este es el punto de partida, pero es necesario ir más allá si queremos determinar el riesgo real de una empresa. La clave será realizar un buen análisis financiero y, sobre todo, un análisis competitivo profundo que nos permita conocer la empresa a fondo.
Como ves, no existen atajos, aunque muchos te intenten convencer de lo contrario. Si estás interesado en aprender analizar empresas a fondo para invertir de la forma más rentable y segura a largo plazo, te animo a unirte al Club de Inversores, con toda a formación paso a paso para aprender a invertir en bolsa y a analizar inversores como un profesional.